miércoles, 26 de agosto de 2009
SEMENYA
Como la mayoría probablemente sabeis, ha habido una agria polémica sobre si la atleta surafricana CASTER SEMENYA, recientemente ganadora de los 800 m. femeninos por una gran ventaja, es realmente un hombre. Esta incertidumbre ha creado un debate muy intenso en los medios y en la opinión pública. Me gustaría compartir con vosotros 5 opiniones sobre este tema, a ver si estais de acuerdo.
1. Como médico, aprecio claramente que hay signos físicos en Semenya (voz grave, masa muscular muy desarrollada, vello facial, etc) que sugieren que podría tratarse de un caso de hermafroditismo o de alguna alteración hormonal. Es evidente.
2. Estos casos son excepcionales, pero existen. Existen protocolos oficiales en las federaciones de atletismo sobre cómo proceder al diagnóstico clínico en estos casos. No cabe duda que deben aplicarse. Sin embargo, considero que es un tema delicado que merece una actuación discreta y diligente por parte de las autoridades. Me explicaré.
3. El sujeto más importante en este tema, por encima del atletismo, las marcas, los medios....es la persona: CASTER SEMENYA. Es pues el valor máximo que debe salvaguardarse. Desvelar en medio de una gran competición mundial este tema y airearlo a los medios de una manera sensacionalista, como ha hecho la IAAF, es en mi opinión desacertado y ha alimentado el morbo más primitivo, lo que ha dolido a la propia atleta y al sentimiento de todo un país. Como la propia IAAF ha reconocido, no lo han hecho bien.
4. Aunque Semenya es joven y su trayectoria es corta, este tema debería haberse tratado de forma discreta entre la Federación de su país y la IAAF antes de los campeonatos. No es un caso de doping que te pilla por sorpresa. El aspecto físico de Semenya y las dudas razonables sobre su identidad sexual son conocidos desde que va al colegio. Por tanto, la Federación de su país no ha afrontado este tema como debía a su tiempo, y ha contribuido a que salte a la luz en el momento de mayor ruido mediático, dañando psicológicamente a la persona.
5. Ver a la abuela de Semenya en su casa en una medio chabola de un pueblo de Suráfrica defender a su nieta ha sido un acto de coraje genial. Me encanta la dignidad que tienen esas mujeres maduras africanas. Un ejemplo ante un continente machista y pobre pero con un espíritu en su gente admirable. Estas semanas tenemos amigos surafricanos en mi casa y me he percatado de ello.....
martes, 18 de agosto de 2009
LAS CORRIDAS DE TOROS
Hoy me he propuesto compartir con vosotros mi opinión, que por cierto tengo muy clara y estructurada, sobre un acto lúdico de carácter recreativo que en algunos ámbitos recibe el nombre de "Fiesta Nacional": LAS CORRIDAS DE TOROS.
Mi postura es claramente contraria y de desaprobación. Me explicaré de manera sucinta y ordenada.
CRITERIO MAYOR #1: como médico, desapruebo que en un acto recreativo una de las atracciones sea que un ser humano ponga en riesgo considerable su vida. Esta fascinación adrenérgica por el riesgo ajeno ya podía encontrase en la antigua Roma con los gladiadores. De hecho, cuando en una corrida de toros las astas del mismo no estás afiladas o están rotas, disminuyendo su peligrosidad, el público suele pedir el cambio de toro.
CRITERIO MAYOR #2: como animal racional, y por tanto animal que puebla al planeta tierra, y por respeto a los otros animales que anidan en nuestro medio, considero que está justificado dar muerte a otro animal para nuestra alimentación o para fines médicos con el fin lograr nuevos tratamientos que puedan ayudar a paliar el sufrimiento humano. En ambos casos creo que se requiren dos condiciones: que no se haga un show de la muerte del animal y que se pongan los medios para evitar su sufrimiento. Por tanto, el hecho que la muerte de un toro ocurra en el contexto de un espectáculo recreativo y sin anestesia alguna me parece poco solidario con la naturaleza y por ello lo desapruebo enérgicamente. Mirad la foto en el que el torero se muestra orgulloso ante el momento justo de la muerte pública de un animal. La foto habla por sí misma.
COROLARIO #1: en algunas ocasiones mis contertulios han rebatido mi postura con dos argumentos: el toreo es en realidad un arte y además cuenta con una larga tradición. Sobre el arte, no dudo que haya componentes estéticos, pero desgraciadamente los dos criterios mayores son apriorísticos, y por tanto no permiten consideraciones estéticas a posteriori. Sobre lo de la tradición, una respuesta sencilla. Que un acto neutro (Ej. tomatina de Bunyol) o positivo (Ej. voluntariado en Africa) se realize durante muchos años le otorga un valor añadido. Por el contrario, la tradición no es óbice para que un acto negativo deba suspenderse. Al contrario, es un argumento más para no prolongar en el tiempo un acto o situación éticmente reprobables. No pondré ejemplos pues hay miles.
COROLARIO #2: respeto a las personas que apoyan o disfrutan con las corridas de toro, pero permitirme discrepar de manera razonada con vosotros. Os animo a que reflexioneis al respecto.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)